Calores de Otoño

Quiero mimarte hasta que los mimos de las calles sean susurros de tu nombre

Quiero acariciarte hasta que tu corazón diga basta quiero más Besarte el cuello y la vida tu línea y tu punto y los coma y encuentre punto y seguido y aparte un sinfín de final y principio el final del principio de un principio sin final La exclamación jocosa y la pregunta ardiente sea una pregunta retórica ¿Más? Las miradas se encuentran y los labios hagan mutis con la piel del otro que la tela y el telón se abran se rasguen y caigan Al suelo En la cama En la mesa En la cocina Tomar la palabra de la boca en varias lenguas y replicar con el cuerpo en un baile de sombras en negrita obscuridad y susurros en cursiva y sin comillas a la luz y candela de tus ojos negros que los versos de besos cabalguen con rimas con sonantes ritmos y encuentren pareja Y encuentren pareja lágrimas de placer del cuerpo sudor frío que se evapora en humo del incendio que asola la noche de una luna de avellaneda hasta que abre el día Hasta que hable el sol y descarguen las nubes el agua y calmen los ánimos Calores de Otoño

Fernando Hurtado Bocanegra