Dos mundos

En el nombre de la rosa de la abundancia y de la rosa del desierto de rostros vacíos de vida, en ambos mundos tan distintos y tan desiguales, que se cambien las rosas y crezcan unas donde otras, que donde hubo despilfarro se necesite de lo mínimo y donde no había nada florezcan verdes colinas de las dunas.

Añade dos tazas y media, una cucharada y un cuarto de otra sopera, medio vaso, unas gotitas y un chorreoncito, al aliño de la vida no le puede faltar alegría...

Mi primer artículo

Aliño de avinagradas miradas con sonrisas aceitosas, fábula en la que vivimos, pasotismo y malos modos en esas personas tan odiosas, tan lejanas a la realidad mundana, esa realidad donde las leyes impuestas cobran su sinsentido, esos debates abstractos, oh! obras de arte efímeras en el torrente cotidiano de noticias, mucha labia y poca acción en la vie en rose de la política española, cada vez más parecida a un circo de engalonados payasos.
De la injusta justicia no hablemos, que faltan adjetivos despectivos en nuestro rico vocabulario acrecentado con insulsos programas de corazón. Pero la liga todavía se esta disputando entre dos empresas, ¡atentos! que ante el menor indicio de cambio saltan los flashes, ¡un jugador lleva un nuevo look!
La guinda del pastel, tramas de corrupción y crisis ecónomica por doquier...y luego dicen que España es un torero y una bailaora...

Si yo fuera mi cuerpo y tu mi ser,
agua de vida, sed de mi ser.

Extracto de un poema que una vez escribí...

Los ¿por qué? sirven, pero hay un momento en el que solo dan problemas...

Ojo a su mirada IV parte

Esa mirada que cabe en un suspiro y no se olvida, suspiro de hálito de vida.
Esos ojos que no tiemblan pero que hacen temblar mis piernas.
Esa mirada que sale indemne de maldades, que nubla a la justicia y la vuelve represión.
Que simple! Dos ojos y no hay palabras! El hipo se corta, la atención se presta a la observación de la belleza ocular, la baba cae.
La arena blanca, tan fina y suave, se hace remolona al caer por el reloj, ella está mirando como pasa el tiempo, el tiempo se para para deleitarse con ella, con la mirada.
La penumbra se hace a un lado en su presencia, desea verla igual que todos, sufre como el basilisco, solo saben que existe, no como es, a esa mirada, basilisco y penumbra le llaman Dios, porque todo el mundo habla de ella, tienen fe en ella y se matan por ella.
Venden su color por separado a precio de oro, el color de sus ojos, hecho cera para pintar.Todo el mundo quiere imitarlo, pero la aunticidad, lejos de ser única, es suya, y la regala a quien la quiera, su mirada por siempre a quienes la quieren.
Ay que ojos! Ay que mirada!, aunque fuese solo ojos, Ay que ojos!

Manchate

Manchate con la pasión,
que se nota todo en derredor.
La nariz percibe tu olor.

Manchate con la pasión
ese arqueo que te das,
esa silueta con luz propia

Manchate con la pasión
sensualidad hecha figura
que se coloca en mil posturas.

Manchate con la pasión,
trastocado tu pelo,
salvaje peinado.

Manchate con la pasión,
que tu voz es cita,
placer que se grita.

Manchate de pasión.
Sudor de vida.
Rubor de mejillas.

Manchate con la pasión
y no te limpies,que vale más que el candor.

Ojo a su mirada III parte

Esos ojos con misterio, con enigma, con interrogante en cada una de sus pestañas, atrocidad sería hacerlos llorar.
Esa mirada que sugiere sin sugerir, como perro del hortelano, inocente y lasciva, que enciende termos y prende cortafuegos.
Ese jardín que florece en tus ojos, ese camino que es perdición y placer que se dibuja en tu mirada, ese deseo que nace de un guiño tuyo.
Ay, que Pegaso voló por tu mirada! Ay, el sin vivir del basilisco, que no te mira por no matar a esa mirada, pero desea mirar!
Esas dunas que se mueven en busca de tus ojos, esos girasoles que se giran en la búsqueda de tu mirada, ay! tus ojos lo son todo, la sintesís del universo, donde el contenido y el idealismo se funden en tu mirada.
Ay, el sin vivir del pintor! que no puede evitar pensar en esos ojos, arte imposible ante tu belleza ocular.
Ay que ojos! Ay que mirada!, aunque fuese solo ojos, Ay que ojos!

Ojo a su mirada II parte

Esos ojos que dan lumbre y encienden hogueras, esos ojos que te clavan al suelo, esa mirada de la que no puedes escapar, ese cincel que se te atraviesa al mirar sus ojos, ese tiempo que permanece, que se clava contigo, donde los segundos no pasan o pasan si te percatas que antes de esa mirada no vivías, no latía tu corazón, ese pestañeo por el que se harían tantas cosas, Ay! cuantas naciones han caído por ojos como los tuyos, rendidas al son del pesar de tus párpados.
Cuando levantas esos ojos se levanta el telón y la obra de mi vida da comienzo, y cuando los cierras me dan de baja por defunción...
Cuando levantas los ojos se hace día, dos soles lucen, dos luceros en la noche y dos puñales en mi pecho.
Ay! esa mirada que desnuda la mentira, pues solo salen de las bocas que te contemplan enunciados a la belleza de tu mirada.
Ay! esa paradoja, dos ojos tan singulares!
Ay que ojos! Ay que mirada! Ay que ojos!

El compromiso es la mentira, y la esperanza es la mentira en la que se apoya el compromiso.

Ojo a su mirada I parte

Esos ojos que prenden locura y te dejan sin aliento en un suspiro. Esa mirada que amarra los impulsos como cantos de sirena y te vuelve animal y te amansa la fiera. Ese lugar sin tiempo que se encuentra en tus pozos sin fondo, en esos ojos donde cualquiera puede caer y no salir nunca.
Esos ojos por los que se ayuna para poder seguir pensando en ellos ininterrumpidamente.
Ese toque de pimienta en la mirada que no te hace estornudar, que te pica, que te hace pensar que se esconde tras esos topacios que brillan en la noche, que brillan por el día, que hace que mis ojos también brillen por la noche, y por el día, y a todas horas.
Ese color y tono tan singular, que los hace iguales a tantos otros ojos pero tan diferente, tan distintivo, que son dos y son todos, que son todos pero son los tuyos.
Esa mirada que hace precisar de un callejero mapamundi porque te pierde con solo un guiño, que solo te encuentras si buscas en sus pestañas, esas pestañas que atrapan en su subir y bajar coqueto o cotidiano.
Ay que ojos! Ay que mirada!, aunque fuese solo ojos, Ay que ojos!

Mi perspectiva

El sonido se propaga por mi vacío, de oreja a oreja, desafiando mis emociones y las leyes de la naturaleza.

Por una puerta entran los gorriones y se van por la ventana.

Vienen a picotearme y sacar algo provechoso de mí, y se van cuando se dan cuenta que no queda nada de mí, o del que yo era cuando entraron.

Salen impunes, libres de mi jaula que nunca tuvo rejilla, libres pero nunca serán tan felices como lo podían haber sido si me hubieran acompañado a hacerme polvo.

He cambiado mis cosas de cuarto, ya no hay ni puertas ni ventanas, solo yo y el tiempo.No tengo miedo, cuando quiera usaré mi corazón para golpear las paredes y salir de aquí, pero por ahora, no.

El lujurioso

Incesante, cautivador y medidor del tempo de la sonrisa alegre de los infortunios, despilfarro de habilidades en pos del sexo...